Teresa Moro

Las cosas, las que tenemos en nuestro espacio privado o las que vemos fuera de él son el principal y obsesivo tema de mi trabajo. Los objetos de uso común, mi conexión afectiva con ellos o el poder de evocación que la constante y (en algunos casos) Íntima relación con nosotros les aporta, han constituido el motivo de mi obra desde siempre.

La observación de lo cotidiano con la intención de desvelar su dimensión más enigmática y evidenciar sus sutiles alteraciones o enrarecimientos. Miro, rastreo e investigo para encontrar las materias de mi iconografía. Trabajo con las cosas corrientes, poco visibles, las que pasan desapercibidas, aquellas que la gente ignora o desecha. Pongo a prueba una estética que requiere una especial sensibilidad por lo banal y lo insignificante. Georges Perec en su libro Tentative d´epuisement d´un lieu parisien, define lo infraordinario como “eso que pasa cuando no pasa nada“.

A partir de un archivo gráfico compuesto por fotos propias y documentación encontrada, desgrano familias de dibujos y pinturas. Son series abiertas a las que voy añadiendo piezas. Esta es mi forma habitual de trabajar, realizando colecciones de imágenes de un mismo motivo, buscando a propósito la acumulación e incluso la sensación de repetición. Me gusta que el espectador se dedique a mirar para detectar las diferencias.
La búsqueda y puesta en valor de detalles, matices y diversidad se ha convertido, en mi caso, en un antídoto contra la frustración que me produce darme cuenta de la paulatina estandarización que la sociedad de consumo está imponiendo en nuestros hábitats.